La piscina infinita sobre las viñas es espectacular.

Las habitaciones cuentan con una decoración única y acogedora.

Desafortunadamente, la experiencia se vio empañada por la falta de opciones de comida cercana. Después de un largo día, tuvimos que conducir para encontrar un lugar donde cenar, lo que resultó ser incómodo. Además, la piscina no ofrecía la relajación esperada, ya que hubo momentos de mantenimiento que interrumpieron la paz que uno busca en una estancia así.

Un rincón de paz y vino

Despertar rodeado de viñedos fue impresionante. La atención de Mireia hizo que cada momento fuera especial. Además, el desayuno era una delicia con productos frescos.

Sin embargo, hay una falta de restaurantes cercanos, lo que te obliga a usar el coche para todo. Por otro lado, el mantenimiento de la piscina fue un poco ruidoso y perturbador.

La decoración del hotel es encantadora y acogedora, lo que crea una atmósfera única. Sin embargo, la falta de opciones de comida cerca, obligándonos a utilizar el coche para cualquier comida, fue incómoda. A pesar de un desayuno simple, el entorno y las vistas eran realmente agradables.

Realmente encantador! Así que acogedor y limpio, ¡tan cerca de viñedos y hermosas vistas!

La habitación era tan cómoda que podría haberme quedado allí a vivir, ¡más acogedora que el sofá de la abuela! Además, el desayuno buffet tenía más opciones que un menú de restaurante, incluyendo croissants recién horneados que me hicieron bailar de alegría.

WiFi lento

Tuvimos una estancia increíble con amigos. Las habitaciones eran super cómodas y la decoración tenía un toque especial. Nos gustó mucho hacer una excursión en bicicleta hacia el pueblo cercano y visitar una bodega local, ¡fue genial! El desayuno era delicioso, con productos frescos y locales. Recomendamos disfrutar de la piscina y los alrededores para relajarse.

Sin embargo, tuvimos que conducir bastante para encontrar lugares donde cenar, lo que fue un poco molesto después de un día explorando.

Increíble estancia! La habitación era tan cómoda que me sentí como en casa 😊. El desayuno, con opciones frescas y locales, fue un festín para empezar el día. Aunque me faltó más variedad en la cena cercana.

La ubicación es excelente, rodeada de viñedos, lo que proporciona unas vistas increíbles. La habitación era muy acogedora, con un estilo restaurado del siglo XIX que me encantó. La atención del personal fue excepcional. Mireia fue especialmente amable y servicial durante toda nuestra estancia. El desayuno fue un punto destacado, con productos locales y opciones variadas que realmente disfruté. Sin embargo, el acceso a servicios cercanos para cenar o almorzar es limitado, lo que obliga a usar el coche. Además, la piscina tenía ruidos de mantenimiento que restaron un poco de tranquilidad. A pesar de esto, definitivamente lo recomendaría para una escapada corta.

una estancia encantadora con detalles por mejorar

La casa es absolutamente hermosa, con un estilo del siglo XIX que te transporta en el tiempo. La atención del personal fue excepcional, siempre dispuestos a ayudar y hacer que nuestra estancia fuera memorable. Además, el desayuno fue un festín visual y gustativo con productos frescos de la zona, realmente delicioso.

Sin embargo, el acceso a opciones de comida fuera del lugar es algo limitado.

El Bolet Casa Modernista es un lugar espectacular. La habitación tiene techos altos y una decoración que mezcla lo antiguo y lo moderno. El desayuno es simplemente delicioso, con opciones frescas y locales que alegran el comienzo del día. Además, ofrecen visitas a su propia bodega, lo que resulta ser una actividad muy interesante.

Falta una mayor oferta de comidas cercanas.

la casa es un encanto, con su decoración modernista y una habitación luminosa y bien equipada. el desayuno fue delicioso, destacando los productos locales frescos y la amabilidad de mireia, quien hizo que nos sintiéramos como en casa.

falta más opciones de comida cercana.

La piscina infinita sobre las viñas es espectacular. WiFi muy lento y sin aparcamiento en el lugar.

Encanto y vistas increíbles

La casa es una maravilla, ¡cada rincón es Instagram worthy! La piscina tiene unas vistas alucinantes de las viñas. El trato del personal fue excepcional, siempre con una sonrisa y listos para ayudar. El desayuno que probamos estaba lleno de productos locales frescos, aunque un poco más de variedad en la carta hubiera sido genial. La única pega fue que nuestra habitación era bastante pequeña, lo cual hizo que las maletas estorbaran un poco.